¿Por qué ocurre el estancamiento?
Según la doctora Fatima Cody Stanford, experta en medicina de la obesidad en el Massachusetts General Hospital, este patrón es universal y lo podemos ver en estudios con otros fármacos como fentermina/topiramato, bupropión/naltrexona e incluso tras una cirugía bariátrica.
La explicación está en el punto de ajuste del cuerpo. Nuestro organismo “sabe” a qué peso está acostumbrado y, cuando intentamos bajarlo, reacciona aumentando la hormona del hambre (ghrelina) y reduce la eficacia de señales como la del propio GLP-1. Es como un tira y afloja constante entre nuestro plan y la biología.
Además, al perder peso también perdemos masa muscular, que es la parte del cuerpo que más calorías quema en reposo. Resultado: el metabolismo se ralentiza y necesitamos menos calorías diarias para mantenernos.
Cómo superar la meseta
1. Combinar tratamientos
Muchos médicos recurren a terapias combinadas: GLP-1 junto con otros fármacos como fentermina, metformina o topiramato, que actúan sobre receptores diferentes en el cerebro. Eso sí, nunca se usan dos GLP-1 a la vez.
2. Ajustar la dosis
En algunos casos se reduce la dosis o la frecuencia: por ejemplo, pasar de una administración semanal a quincenal, buscando el punto justo que mantenga el peso y la salud con la mínima medicación necesaria.
3. Revisión de otros fármacos
Si se están tomando medicamentos que favorecen el aumento de peso (como insulina o sulfonilureas), se intenta sustituirlos o ajustar la dosis.
4. Ejercicio inteligente
Aunque el ejercicio no siempre implica pérdida de peso directa, el entrenamiento de fuerza ayuda a preservar la masa muscular, lo que mantiene el metabolismo activo. Lo ideal: mitad cardio, mitad fuerza.
Más allá del peso
Estos medicamentos también aportan beneficios adicionales, como mejoras en la salud cardiovascular y la función renal. Por eso, incluso si el peso no sigue bajando, puede merecer la pena mantener el tratamiento.
Historias reales lo confirman: desde pacientes que han recuperado la movilidad y vuelto al trabajo, hasta otros que han controlado su diabetes después de años de lucha.
El factor psicológico
La motivación y el bienestar emocional son clave. Al perder peso y sentirse mejor, muchas personas empiezan a cuidarse más, lo que ayuda a mantener los resultados. Aquí el apoyo psicológico es tan importante como la medicación y la dieta.
Conclusión
La pérdida de peso con GLP-1 es un camino a largo plazo. Entender la meseta como parte del proceso, ajustar la estrategia y cuidar tanto la salud física como mental son los ingredientes para el éxito sostenido.